Omar Adolfo Scarel es quien elevó el informe al juez Lorenzini, como presidente del directorio de Vicentín saic.
En la comunicación, además le anticipa al magistrado que el 28 de febrero de 2022 se presentarán al expediente, la propuesta de elaboración empresarial conforme lo requirió el juez con relación al complejo fabril que tienen en Avellaneda.
El informe refiere al polo productivo que Vicentín tiene aquí en el norte santafesino, con una variada cantidad de unidades de negocios que «se complementan y permiten aprovechar los recursos al máximo»: Plantas industriales de Etanol, Alimento Balanceado, Biodiésel, Biogás, Almacenaje y Servicios.
Con relación al personal afectado a tareas en el complejo industrial, dice que cuenta con una dotación total de 206 personas distribuidas en diferentes áreas y unidades de negocio que lo comprenden, lo que divide en «25 celdas».
Planta de Etanol
Dice que se desarrolla en 32.000 m2 de superficie total dentro del predio, con una plataforma de descarga con capacidad de hasta 120 toneladas por hora; con una celda de 35000 toneladas de capacidad para almacenaje de maíz, y dos silos diarios de 500 toneladas cada uno. Posee además, tanques de almacenamiento de bioetanol con una capacidad de almacenaje de 5.900 m3.
Sostiene que es posible que este negocio pueda despachar hasta 600 m3 por día de diferentes tipos de alcoholes, y 600 toneladas por día de burlanda humedad y/o seca.
Esta planta cuenta con 53 personas trabajando en forma directa, en cuatro turnos de 8 horas cada uno, dado que la planta en normal funcionamiento opera los 365 días del año, con solo algunas paradas menores para mantenimiento.
El plantel está compuesto por un gerente de planta, un jefe de producción, y un jefe de mantenimiento del total de los empleados, prestando tareas en la planta 16 personas que están fuera de convenio, encontrándose los demás incluidos dentro del convenio de la Federación aceitera.
Actualmente la planta se encuentra operativa, pero con niveles de producción muy bajos respecto de la capacidad de producción de 310 m3 por día.
Explican que la producción y venta del producto está regulada mediante cupos establecidos por ley, ya que las petroleras deben abastecerse en función de las cuotas asignadas; y que en esta industria, Vicentín se posiciona como un actor relevante desde el año 2012, dado que industrializa gran parte del maíz de la región.
Le dicen al juez que «el problema que deben superar» radica en que las cobranzas de etanol realizada por la sociedad a las compañías petroleras, han sido cedidas al Banco de la Nación Argentina en oportunidad de afianzar los préstamos de prefinanciación por exportaciones que otorgó oportunamente dicha entidad financiera. Como consecuencia de ello, al día 30 de noviembre de 2021, el Banco Nación tenía retenidos 610 millones de pesos en un plazo fijo, y 66 millones de pesos en una cuenta recaudadora que no da remuneración. Sostiene que «estos fondos convertidos al tipo de cambio del día de cobro respectivo, representan 8,9 millones de dólares».
Explica que en la estructuración original, la sesión de las cobranzas (al Banco Nación) actuaba como garantía, dado que «los préstamos financiaban las actividades Core; y -actualmente- de mantener las ventas, esta estructuración provocaría una descapitalización permanente con cada una de ellas; como consecuencia de esto, la sociedad ha perdido capital de trabajo para posibilitar la continuación regular de la operación».
Actualmente esta planta opera en cantidades mínimas, con el agravante de que su producción no puede ser reactivada mediante fazones -salvo casos aislados- en virtud de que la cuota de la Secretaría de Energía está asignada legalmente a Vicentín. No obstante, entre noviembre y diciembre de 2021, se comprometieron 5.000 m3 de bioetanol mediante fasón transitorio a terceros, cuyas plantas estaban en mantenimiento, autorizado por la mencionada Secretaría de energía.
Con el objetivo de mantener las 208 fuentes de trabajo de esta unidad, eje fundamental de los valores de la compañía, Vicentin dice que debió redirigir la producción de la planta hacia otros alcoholes derivados del proceso, existiendo aún la posibilidad de reactivar esta planta para producir de manera satisfactoria para todos; y que en caso de qué logren reactivar esta unidad de negocio, la producción posible sobre el cupo de etanol de maíz es de 79.700 m3 por año, lo que representa el 14% del cupo para maíz del país.
En lo que respecta a la producción complementaria de alcoholes, el hidratado para biocombustible podría llegar a 12.000 m3 por año; y el Alcohol Buen Gusto, a 6.000 m3 por año.
También podrían producir subproductos tales como 75.000 toneladas de Burlanda húmeda al año, más 30.000 toneladas BS de Burlanda seca por año; y 14.000 toneladas BS de Thin Stillage por año.
Los insumos necesarios para esta reactivación serían 24.0000 toneladas por año de maíz, 305.000 toneladas de vapor por año, 29.500.000 kWh por año de energía eléctrica; y 240.000 m3 de agua de proceso por año.
En lo referente al capital de trabajo necesario para llevar adelante el objetivo de la reactivación, el maíz -como principal insumo- podría ser provisto por uno o más inversores estratégicos, situación que entiende Vicentin, permitiría retomar la actividad con mayor facilidad en caso de que el Banco Nación encuentre razonabilidad en la propuesta presentada en la reestructuración de su crédito, el cual -recuerdan- recae sobre las cobranzas de Etanol.
Seguidamente cuentan al juez la propuesta que elevaron al Banco Nación para reestructurar el crédito, donde el Banco Nación es «acreedor privilegiado». Vicentín busca sustituir garantías, de manera que quede afectado al esquema de sesión de cobranzas el 8% de las mismas para poder asegurar así la generación de capital de trabajo que asegure el funcionamiento de este polo productivo.
Vicentin dice que ofreció al Banco Nación una hipoteca en primer grado sobre la totalidad del terreno que ocupa su parque industrial en Avellaneda, sobre el que se edifica la planta de Etanol, el almacenaje, y la planta de generación de energía de Vicentín.
Insiste la empresa concursada que «si el Banco Nación accede a reestructurar las garantías, se aseguraría un mejor recuperó del crédito, ya que la planta produciría su máximo rendimiento, generando mayor volumen de repago del que tiene actualmente».
Al respecto vale recordar que en ReconquistaHOY ya le contestó Claudio Lozano en nombre del directorio del Banco Nación.
Planta de alimentos balanceados
Vicentín cuenta que tienen una planta de 4.600 m2 de superficie, reparada, lista para elaborar productos, con cuatro silos de hormigón armado de 4000 toneladas de capacidad para almacenar maíz, y dos silos de 90 y 60 toneladas más.
La capacidad de proceso o elaboración asciende a 400 toneladas por día de alimento balanceado a granel, y para eso posee 3 celdas de 100 m2 para almacenamiento de insumos, y dos tolvas elevadas con capacidad de 80 toneladas cada una.
Esta planta de alimentos balanceados tiene un encargado y 8 operarios, lo que también incluye el sector de deslindado de granos de algodón, que se utiliza en caso de agregar esta materia prima del proceso.
Recuerda Vicentin al juez que esta planta de alimentos balanceados funcionó hasta el 31 de diciembre de 2020, elaborando alimentos balanceados para el Frigorífico Friar, y que durante 2021 se realizó el mantenimiento total de la planta, estando a la fecha del informe en condiciones de comenzar a elaborar nuevamente.
Vicentín dice que existe la posibilidad de asociarse con un concesionario, dónde la concursada otorgue la concesión de la planta, y el concesionario aporte el grano, mantenga las fuentes de trabajo, asegure el pago de impuestos, y realice el mantenimiento necesario. Otra opción posible es trabajar a fasón para terceros, o elaborar alimentos balanceados para comercializar en la zona de influencia.
Biodiesel
Cuentan que la planta de biodiésel posee una superficie total de 5.800 m2, y está desarrollada con tecnología Auxxon, de origen argentino. Esta planta tiene una capacidad de producción de 125.000 TPA.
Actualmente, la planta de Biodiésel está fuera de operación, sin funcionar desde 2012, consecuencia de la modificación de los cupos otorgados por la Secretaría de Energía para la elaboración de biodiésel; por eso la planta fue dada de baja en los registros de la Secretaría.
Informaron que el personal que tenían en la planta de Biodiésel, fue pasado a la planta de Bioetanol, o sea que actualmente no hay nadie afectado a la planta de Biodiésel, parada desde el año 2012.
Para poner reactivar la planta de Biodiésel, Vicentín opina que es necesario evaluar la factibilidad, ya que la distancia entre tanques no estarían ajustadas a la realidad de la plata.
Biogás
Informaron que esta unidad de negocios se encuentra gestionada íntegramente por una sociedad del mismo nombre, en la cual Vicentín posee el 50% del capital accionario, mientras que industrias JF Secco posee el 50% restante.
Sostienen que «se trata de un sistema de producción de energía sustentable mediante el proceso de digestión anaeróbica».
Esta compañía posee un contrato con Cammesa por un plazo de 20 años a partir de marzo de 2019 para la provisión de 6 MW por hora de inyección al Sistema Interconectado Nacional de Energía Eléctrica de origen sustentable; y aclara que este contrato prevé multas por incumplimiento si no abastece el cupo anual comprometido.
Esta producción de biogás se desarrolla en una planta de cuatro hectáreas, en la cual hay 6 biodigestores con capacidad unitaria de 4.200 m3, y capacidad instalada de 25.200 m3. Además tiene 6 cogeneradores con capacidad unitaria de 1.5 MW, y capacidad instalada de 9 MW.
En lo que respecta a la situación actual de la planta de biogás, destaca Vicentín que la reducción de la producción de la planta de Bioetanol de principios del año 2020, generó una disminución del caudal de alimentación de vinaza a la planta de biogás.
Evaluando el escenario a futuro, considerando que la planta fue diseñada para funcionar a partir de los subproductos recibidos de la planta de etanol, Vicentín concluye que si la planta de etanol puede recuperar su actividad normal, esta planta de generación de energía obtendrá en consecuencia la mejor mezcla posible para obtener biogás a costos razonables.
Almacenaje
Esta planta de Vicentín posee una superficie total de 28.000 m2, y cuatro plataformas de descarga de 100 toneladas por hora, cada una.
El plantel de esta unidad está compuesto por un total de 11 personas, conformado por un encargado y 10 operarios. Esos operarios son los mismos encargados de la descarga de los distintos granos para los distintos procesos: bioetanol, balanceado y acopio propio o de terceros.
Actualmente esta unidad de almacenaje presta servicios de acopio al Frigorífico Friar, que deposita granos de algodón y maíz.
También presta servicios a la Unión Agrícola de Avellaneda con granos de soja y maíz; y además, tiene alquilada parte de las celdas a Algodonera Avellaneda para el depósito de fardos.
Vicentín le dice al juez que esta unidad de almacenaje o acopio, puede continuar funcionando bajo el régimen de alquiler o prestación de servicios de almacenaje a acopiadores y/o productores agrícolas de la zona.
Servicios
Vicentín cuenta al juez que en su complejo industrial, prestan servicios compartidos para las unidades de etanol, alimentos balanceados, almacenaje y prestación de servicios a otras empresas, como generación de vapor a través de cuatro calderas acuotubulares, generación de energía, planta de tratamiento de agua para procesos y calderas; y sistema contra incendios para toda la planta.
Esta unidad de negocios ocupa 56 personas destinadas a la prestación de servicios generales, y 77 personas afectadas a la prestación de servicios auxiliares en el complejo, todos distribuidos entre los diferentes servicios prestados, tales como almacenaje, balanzas, calado, calderas, mantenimiento mecánico, conservación y limpieza, entre otros.
En la actualidad prestan el servicio de vapor agua y energía a la planta de bioetanol, el servicio de vapor y energía a la planta de Friar que produce harina de hueso, el servicio de vapor de agua y energía eléctrica a Domitec, empresa que elabora productos sanitarios; el servicio de vapor y energía eléctrica para Buyanor, que se dedica a producir algodón hidrófilo; y los servicios de portería, balanza y limpieza a las empresas que alquilan dentro del predio.
Con respecto al escenario futuro de la prestación de estos servicios, Vicentin entiende que será posible continuar operando en los mismos términos adicionando la prestación de servicios a la planta de alimentos balanceados. En este sentido -aclara- es necesario considerar que el funcionamiento de esta sección está ligado al de todo el Parque Industrial Avellaneda, de manera tal que su normalización permitirá su sustentabilidad.
Terminan diciendo en su presentación al juez del concurso, que fue la importancia de la infraestructura que tienen en la zona del Gran Rosario, lo que provocó el desarrollo de la empresa aqui en el Norte Santafesino, donde nacieron, donde está su pilar, y donde siempre mantuvieron la cabecera y el centro de decisiones.
Advierte que actualmente, los negocios que se asientan aquí en el norte santafesino, están afectados o paralizados, lo que se explica tanto por la atención privilegiada a los negocios más rentables del sur, como por las dificultades que hay que superar en el norte.
Vicentín destaca que el bioetanol es el corazón de vicentín aquí el norte, motivo por el cual su desarrollo es el desarrollo de todo el nodo, a pesar de que para las empresas ajenas a la zona es natural el desinterés en él, sin embargo, con una adecuada reestructuración, opinan que es posible retomar impulso en su progreso, lo que permitiría mantener la mayor parte de las fuentes de trabajo. «Estos objetivos podrían alcanzarse con gestión y sin afectar la caja que generarán los activos del nodo sur».
Finalmente Vicentín advierte al juez que si el Banco Nación no reconsidera la garantía, no podría operar normalmente, y por fondos insuficientes no podría sostener las fuentes de trabajo actuales, ni soportar el mantenimiento industrial necesario del complejo.