La ciudad de Vera se vio fuertemente afectada por un intenso temporal que dejó la caída de alrededor de 420 milímetros de lluvia acumulada en pocas horas. Las precipitaciones provocaron anegamientos generalizados, con numerosas familias que debieron ser evacuadas de sus hogares debido al ingreso de agua.
Ante la gravedad de la situación, trabajan en el lugar servicios de emergencia locales junto a dotaciones de bomberos voluntarios de Reconquista, Romang, Tostado y Malabrigo, que prestan colaboración para asistir a los damnificados y realizar tareas de rescate y contención.
Desde Protección Civil informaron que se habilitaron centros de evacuados y que continúan monitoreando la evolución del fenómeno meteorológico, que mantiene en vilo a toda la región.
Desde el atardecer del lunes, la ciudad de Vera fue inundada por una lluvia torrencial que en seis horas totalizó 420 mm.
La intendente Paula Mitre calificó la situación como «una catástrofe «.
Colapsaron calles, veredas, patios y desagües, por lo que numerosas viviendas fueron inundadas por el agua que no encontraba salida suficiente. Algunas familias perderán todo,
Cien personas tuvieron que ser evacuadas. Para eso, Defensa Civil de la ciudad, con refuerzos de Reconquista y de otras reparticiones de la región; y también de la provincia (que reaccionaron al instante) habilitaron varios refugios, como los clubes Huracán, Ferro y Gimnasia; y un centro barrial de la zona Sur: San Martín de Porres.
Además, se habilitó la línea telefónica 3483 490824 para atender a aquellas familias que necesiten evacuación o algún tipo de ayuda en la emergencia.
Mientras se mantenga la situación de emergencia, las autoridades solicitaron a la población evitar la circulación en la vía pública, salvo en casos de extrema necesidad.
Varias escuelas ya habían avisado anoche de la suspensión de clases en todos sus niveles.
Remarcó que es una situación sin precedentes, señalando que «no hay en la historia de Vera un registro de tanto volumen de agua en tan poco tiempo».