Se trata del cardenal amarillo, de quien quedan menos de 3.000 ejemplares en todo el mundo. Hace unos días se observaron 20 nuevos en las inmediaciones de un reservorio de agua en campos del Este mendocino.
El cardenal amarillo es una especie de ave que se encuentra en peligro de extinción, no solo en Mendoza, sino en todo el país. En la provincia, por ejemplo, su caza y tráfico se encuentran penados por la Ley de Protección de Fauna Silvestre, que contempla multas y sanciones para quienes los atrapen y comercialicen en el mercado negro.
Y es por esto mismo que el reciente avistaje de más de 20 ejemplares de cardenal amarillo en una zona en la que -a priori- no se tenían registros de su presencia es una excelente noticia. Y, según destacan los especialistas, la presencia de amplios reservorios de agua con rampas de escape en estos campos del Este provincial se convierte en fundamental para que comiencen a observarse nuevos ejemplares de estas aves.
El cardenal amarillo (Gubernatrix cristata) es un ave exclusiva de Sudamérica y vive en los bosques de espinal, del monte y del Chaco Seco de Argentina, Uruguay y Brasil. Suele ser capturado ilegalmente para ser vendido como mascota y, en las últimas décadas, sus números poblacionales están decreciendo a ritmo preocupante. Se cree que sobreviven entre 1.500 y 3.000 individuos en el mundo, lo que lleva a que la especie está considerada “en peligro de extinción”, con la posibilidad de encontrarse extinta en sitios específicos.