Concretar y enfocar
Si quieres sacarle el máximo provecho a tus conversaciones, ayuda a tu colaborador a ser concreto y enfocarse en lo importante
Permanecer en silencio te ayuda a escuchar activamente.
A su vez, cuando escuchas activamente puedes percibir cuando la otra persona está dándole muchas vueltas al asunto, extendiéndose con demasiados detalles y desviándose de lo que es importante.
En estos momentos hay una técnica muy simple que puedes usar para ayudar al otro a ser concreto: interrumpirlo de forma respetuosa.
Por ejemplo, si el tema central de la conversación es mejorar el cumplimiento en los tiempos de entrega de pedidos, y tu colaborador está contándote con muchísimos detalles lo que sucedido con varios clientes, puedes decirle algo como por ejemplo:
“Discúlpame te interrumpo, me parece muy valioso lo que estás diciendo y me gustaría que nos enfoquemos en lo más importante del asunto. Qué tal si en vez de contarme los detalles de lo que sucedió con cada cliente, me cuentas ¿qué tienen en común todas estas situaciones?”.
También puedes de manera directa, respetuosa y cálida decir:
“Permíteme interrumpirte, gracias por compartir esta valiosa información. Siento que nos estamos desviando del tema prioritario y me gustaría que nos enfoquemos en el tema central, para que optimicemos el tiempo y lleguemos al corazón del asunto”.
Adicionalmente, puedes realizar preguntas que le ayuden al otro a enfocarse, por ejemplo:
¿Cuál es el tema central?
¿Qué te quieres llevar de esta conversación?
¿Qué aprendiste de la situación?
¿Qué es eso esencial que quieres compartir conmigo?