Mauricio Gramuglia, un emprendedor apasionado, encontró su verdadera vocación en el mundo de la producción de miel. Aunque estaba estudiando Ingeniería de Sistemas, su destino lo llevó por un camino diferente cuando un amigo le propuso iniciar un emprendimiento juntos en 1996. Inspirado por la pasión apícola de su padre, decidió embarcarse en esta aventura y dejarlo todo por su sueño.

Comenzaron modestamente con solo 50 colmenas, pero su dedicación y esfuerzo los llevaron a crecer rápidamente. Después de cuatro años, decidieron tomar caminos separados, pero la semilla del emprendimiento ya estaba plantada en Mauricio. Fue en 2019 cuando finalmente dio un paso adelante y fundó Apoidea, una empresa dedicada al fraccionamiento de miel.

Mauricio no se conformó con producir miel común, quería agregar valor a su producto y destacarse en un mercado competitivo. Fue así como se le ocurrió la idea de producir miel cremosa, una variante batida que resultó ser un gran éxito en Tandil y sus alrededores. La mayor parte de su producción ahora se destina al fraccionamiento, y también sigue vendiendo miel a granel y a otras fraccionadoras.

A lo largo de los años, Mauricio ha enfrentado diversos desafíos económicos que podrían haber desalentado a cualquiera, pero su espíritu emprendedor y su pasión por la innovación lo han mantenido en pie. Siempre está dispuesto a reinventarse y encontrar nuevas formas de destacarse en el mercado. Incluso la pandemia de 2020 fue solo otro obstáculo que logró superar con ingenio y determinación.

El emprendimiento de Mauricio no es solo una historia individual, sino un esfuerzo familiar. Su compañera, María Elisa Aramburu, se encarga del manejo de las redes sociales, mientras que su hija Delfina lo ayuda con los repartos y Edgar La Rocca es su fiel ayudante en el taller. Juntos forman un equipo dedicado y comprometido.

La miel cremosa de Apoidea se ha convertido en un producto destacado en el mercado. Mauricio utiliza un proceso cuidadoso para batir la miel y lograr una consistencia suave y untuosa. La miel cremosa no solo es perfecta para untar, sino que también ha ganado popularidad entre los deportistas y aquellos que buscan un regalo especial y delicioso.

Apoidea ha logrado expandir su alcance más allá de Tandil. Actualmente, venden sus productos en comercios locales, dietéticas y tienen pedidos de diferentes partes del país. Aunque enfrentan desafíos logísticos, su calidad y reputación han atraído a clientes fieles que aprecian la cremosidad y el sabor excepcional de su miel.

La historia de Mauricio Gramuglia y Apoidea es un testimonio inspirador para todos los emprendedores. Nos recuerda que con pasión, perseverancia y un toque de innovación, es posible destacarse en un mercado competitivo. Mauricio ha demostrado que los obstáculos pueden convertirse en oportunidades y que el valor agregado puede marcar la diferencia. Si él pudo convertir su pasión en un exitoso emprendimiento, ¿por qué no tú? ¡No tengas miedo de seguir tus sueños y hacer realidad tus ideas!